Resulta que desde hace unos 10 años, el sushi se ha vuelto más popular que de costumbre, y arrastrado a él, el salmón.
Recuerdo que de chica esperaba con ansias algún casamiento o fiesta de "gente bien", para poder disfrutar de este pescado que dicen, es muy sano por sus grasas Omega 3, pero sin dudas una delicia para aquellos que se le animan.
LUGAR. Si caminás por Azcuénaga y Las Heras (yendo para Santa Fé), es inevitable que te detengas a mirar una pequeña casa de té, con paredes blancas, mesas del mismo color y sillas, de las de jardín de los años '50 con respaldos sinuosos. Se puede ver detrás del vidrio que está en un entrepiso bajo. Y adentro, al fondo, hay decenas de cartas con sobres de colores colgadas del techo en distintos hilos que hacen alusión al nombre: POSTDATA
BAGUEL DE SALMÓN. Los platos llevan nombres de diferentes ciudades, en este caso, el Baguel Usuahia. El pan superior tiene un agujero en el medio, como todos los baguels. Este modelo de sandwich nació en Cracovia en el 1600, y luego se popularizó en la comunidad judía. Hoy en día, se combina con huevo, para el desayuno, o con cualquier cosa que se les ocurra, dulce o salada.
El Usuahia lleva salmón aumado, queso crema y hierbas, contenidas por un pan de parmesano.
Personalmene, no le pondría queso crema o bien, muy poco porque cuando es muy cremoso se pierde el gusto del salmón en el boca y no es algo que yo quiera perderme.
Está bueno para pedirlo a la tardecita, con algún té helado de esos que hay en este barcito.